Lo decidió el gobierno nacional. El traslado a las facturas será para usuarios residenciales de ingresos altos y comercios e industrias.
El Gobierno redujo los precios estacionales del gas pero aumentó los de la luz, lo que tendrá un impacto en las tarifas que deben abonar usuarios residenciales de ingresos altos y sectores productivos a partir de octubre.
La decisión de actualizar los precios estacionales energéticos fue realizada por la Secretaría de Energía mediante las Resoluciones 283 y 284/2024 publicadas este lunes en el Boletín Oficial “con el fin de mantener los precios y tarifas del sector en valores reales lo más constantes posibles, y de evitar así un proceso de deterioro de los mismos que no permitan el sustento del sector y hasta amenacen su continuidad”.
En relación al gas, la medida dispone una baja del 10,37% en el Punto de Ingreso al Sistema de transporte (PIST) pero al mismo tiempo aumenta un 2,7% las tarifas de transporte y distribución del hidrocarburo por redes.
El traslado de la reducción en los valores de producción de gas se realizará para los usuarios residenciales N1 (ingresos altos) y los sectores productivos (comercios y pequeñas industrias), mientras que para los usuarios N3 (ingresos medios) y N2 (ingresos bajos) se siguen manteniendo las bonificaciones del 55% y 64% sobre el consumo subsidiado, respectivamente.
Por el lado de la luz, se definió que el Precio Estacional de la Energía Eléctrica (PEST) que se trasladará a las facturas a partir de octubre será entre $63.187 y $66.885 por kWh para los usuarios de ingresos altos y comercios e industrias.
En tanto que los consumidores de ingresos medios y bajos siguen manteniendo las bonificaciones del 55% sobre el bloque subsidiado (250kw por mes) y del 64% sobre el bloque subsidiado (400kw por mes), respectivamente.