“Dept. Q” es una nueva serie británica, que se estrenó ayer en Netflix, que se adentra en el género del thriller policial y de misterio. Está basada en la popular serie de novelas del autor danés Jussi Adler-Olsen, aunque la adaptación de la plataforma traslada la acción de Dinamarca a la gótica y atmosférica ciudad de Edimburgo, Escocia.
La trama sigue la historia del inspector jefe Carl Morck (interpretado por Matthew Goode), un detective brillante y perspicaz, pero con una personalidad muy complicada y un sarcasmo que lo hace un compañero difícil. Tras un trágico incidente en el que uno de sus colegas muere y otro queda paralizado, Carl es relegado a un nuevo departamento: el Departamento Q.
Este departamento, ubicado en el sótano de la comisaría, es creado inicialmente como una especie de “truco publicitario” para la policía, con el fin de investigar casos sin resolver (cold cases) que nadie más ha podido o querido abordar. Aunque al principio Carl trabaja solo, pronto comienza a reunir un equipo de “inadaptados” y agentes relegados, quienes, al igual que él, tienen algo que demostrar.
En resumen, “Dept. Q” es un thriller con una atmósfera oscura, personajes complejos y una trama intrigante que combina la resolución de crímenes con el desarrollo psicológico de sus protagonistas. Es una apuesta para los amantes de las historias de detectives y del género noir.