Un vecino de Villa Mercedes demostró que algo hay de verdad en la popular frase «tiene un Dios aparte». Viajaba en su auto por la autopista de las Serranías Puntanas y, en un determinado momento, volcó. El vehículo quedó irreconocible, toda la carrocería hundida, hace difícil pensar que alguien pueda volver a conducirlo. Pero, a pesar de todo, su conductor resultó ileso.
Sucedió en el kilómetro 771, alrededor de las 13 del domingo. De acuerdo a lo que informaron los voceros de Relaciones Policiales, el hombre de 46 años circulaba en Chevrolet Aveo de este a oeste por la ruta.
En un instante y por razones todavía a establecer, perdió el control del volante. El auto se dio vuelta y, tras varios tumbos, terminó sobre el cantero central que divide ambas trochas. Quedó posado sobre su lado izquierdo.
Su conductor pudo salir del rodado por sus propios medios. Y, si bien fue revisado por el personal médico de una ambulancia del Sempro, no fue necesario trasladarlo a un centro de salud porque no resultó herido.
Los bomberos, por otro lado, «cortaron la energía del vehículo, desconectando la batería y asegurando la escena para evitar otros daños adicionales», detallaron desde Relaciones Policiales.
