La Cámara de Diputados de la provincia de San Luis derogó hoy la ley que impulsó el gobernador saliente, Alberto Rodríguez Saá a través de la cual había creado 53 cargos políticos en el ámbito de la Legislatura para ser ocupados por funcionarios y dirigentes del oficialismo provincial.
En cambio, no fue afectada ni la recategorización ni las mejoras salariales de los empleados legislativos, dos cuestiones que habían sido introducidas por el oficialismo en el proyecto original para condicionar la creación de esos nuevos cargos políticos.
Fue a instancias de la aprobación de una nueva ley llamada de «Reestructuración ética y funcional de las Cámaras de Diputados y Senadores de la provincia de San Luis» y cuyo tratamiento sobre tablas fue impulsado por el diputado Luis Lucero Guillet.
Así fue que quedaron sin efecto los futuros nombramiento de esos 53 cargos políticos con pagos mensuales de 800 mil pesos que Rodríguez Saá había reservado para sus dirigentes de confianza.
La sanción de la nueva ley fue posible con el voto de los legisladores poggistas, de la UCR, Todos Unidos, Sanluiseños por el Cambio, Fuerza Independiente y Trabajo por el Pueblo. Todos ellos lograron quórum propio y aprobaron la eliminación de los 53 cargos mientras los diputados del oficialismo se retiraron del recinto para no votar. La sesión fue presidida por la diputada Berta Arenas.
La sólida argumentación de Lucero Guillet exhibió el escaso números de despachos de comisiones -29 en lo que va del año- como para “justificar” 53 nuevos cargos que además tendrían un estricto componente político: funcionaría como “aguantadero” de funcionarios que deben dejar el gobierno el 10 de diciembre.
La intención del oficialismo, dijo Lucero Guillet, era “crear espacios donde van a ir a recalar todos los funcionarios incluso algunos diputados cuyo mandato se les acaba el 10 de diciembre y de no ser creadas estas estructuras, seguramente tendrán que salir a trabajar en la actividad privada como todos lo hacemos”.
Y definió como “cobarde” la actitud del oficialismo porque “no se atrevieron a presentar un proyecto que dijera que vamos a crear 53 cargos para funcionarios, lo mezclaron con un artículo donde incorporan mejoras salariales para el personal de la Legislatura. Acá es mezclar blanco y negro, a los trabajadores que hace tiempo vienen reclamando una recomposición con aquellos que entrarán por la ventana”.