El vicegobernador, de una familia de la raíz del árbol de peronista de San Luis, destacó la presencia de familiares de ex gobernadores e intendentes. Su abuelo y su hijo en las puntas de su discurso.
Uno imagina que le cruzaron muchas historias y recuerdos por su cabeza. Esto a cuenta de que protagonizó uno de los momentos más emotivos que se hayan vivido en la Legislatura de San Luis. Faltaban 15 minutos para las 11 de la mañana cuando Ricardo Aníbal Antonio Endeiza, ese ex alumno de la escuela Juan Pascual Pringles, que supo presidir el Centro de Estudiantes, hincha de Juventud, ahora un hombre de 52 años, abogado y vicegobernador electo, dijo “Sí, juro”.
Fue por Dios y por la patria, y seguramente por sus antepasados -raíces del árbol peronista de San Luis- como su abuelo el gobernador Víctor Endeiza, que gobernó San Luis entre 1952 y 1955.
El ex fiscal de Estado en la gobernación de Claudio Poggi entre 2011 y 2015, abogado que intervino en causas clave de la historia política reciente de San Luis, se sentó a presidir la Asamblea Legislativa luego de que le tomara juramento el vicegobernador saliente, Eduardo Gastón Ramón Mones Ruiz.
Fue el propio Endeiza quien se encargó de agradecerles, uno por uno, a los familiares de ex mandatarios provinciales que con su presencia le dieron a su asunción y a la de Claudio Poggi un respaldo institucional como nunca antes se vio en la historia de San Luis.
Allí estuvieron Ana María Sosa Pez, sobrina chosna del primer gobernador de San Luis, José Santos Ortiz; Ricardo Zavala Ortiz, hijo del ex gobernador Ricardo Zavala Ortiz; Antonio Endeiza -padrino suyo- e hijo del ex gobernador Víctor Endeiza; Rosario Charo Domeniconi, hija de Alberto Domeniconi quien gobernó San Luis entre 1958 y 1962.
También dijeron presente Guillermo Besso, nieto del ex gobernador Santiago Besso, cuyo mandato fue entre 1963 y 1966; Agustina Rodríguez Saá, hija del ex gobernador, Adolfo Rodríguez Saá, y Alicia Lemme, ex gobernadora en el período 2001 -2003.
El vicegobernador, que recordó la fecha del 40° Aniversario de la recuperación de la Democracia, y que mencionó a Raúl Alfonsín y a Adolfo Rodríguez Saá quienes entonces asumieron en la presidencia de la Nación y la gobernación de San Luis, rescató también la presencia en el recinto legislativo de Ester Picco, hija del ex intendente Juan Bautista Picco, primer intendente desde 1983; y del ex intendente de San Luis para el período 1987 – 1991, Javier Cacace.
Ese reconocimiento por parte de Endeiza llegó también para Miguel Bonino, que participó de la ceremonia. El dirigente villamercedino llegó a la intendencia de esa ciudad en 1983 con sólo 28 años. Y luego la mención fue para Mario Raúl Merlo, cinco veces intendente de esa ciudad, y que ayer estuvo en la Legislatura. A todos ellos Endeiza los consideró “símbolos de la restauración democrática”, y luego reflexionó sobre los años de trabajo, esfuerzo y superación de obstáculos que compartió con Claudio Poggi para llegar a ocupar estos lugares. “No ha sido magia” dijo Endeiza, sino fruto de años de esfuerzo, tiempos en los que también estuvo acompañado por dirigentes que fallecieron sin ver este momento político: Gilberto Zavala, Leandro Despouy y Oraldo Britos.
Dos agradecimientos puntuales cerraron el mensaje del vicegobernador. El primero para sus padres, ambos fallecidos, Dugen e Irma. El segundo, para su hijo Juan Manuel Endeiza, a quien definió como el destinatario de todos sus esfuerzos para bregar por la institucionalidad el trabajo y las oportunidades que deben tener todos los chicos de su generación en San Luis.