El director de Epidemiología sostiene que las medidas preventivas como la ventilación y la higiene de manos son fundamentales. También recomienda vacunarse, en especial a quienes son de grupos de riesgo.
La pandemia de coronavirus, oficialmente terminada en mayo de 2023, causó estragos. Pero generó algunas buenas costumbres que es necesario recuperar y mantener, no solo por los casos de Covid-19 que todavía se producen y se seguirán produciendo, sino para defenderse de cualquier otra enfermedad respiratoria, asegura el jefe de Epidemiología de la provincia, Edgar Ribba.
“Causalmente en esa época y después de haber continuado con esas medidas no hubo aumentos ni aumentaron los casos de la gripe común. Fueron medidas preventivas para cualquier enfermedad de transmisión respiratoria”, señala el médico, en alusión a todos los cuidados que la población adoptó para evitar contagios.
Ribba transmite tranquilidad al señalar que “no hay un aumento significativo de casos de Covid en este momento en la provincia”.
El Ministerio de Salud de San Luis informó que en la provincia se registra un solo caso de un paciente de alto riesgo con coronavirus, al que debieron internar en el Hospital Central “Doctor Ramón Carrillo”. “Los profesionales monitorean diariamente la situación epidemiológica en la provincia y su evolución”, agregaron.
El Ministerio de Salud mantiene la vigilancia a través de las unidades de monitoreo ambulatorio (UMA). “Hay veinticuatro en el país y una está en Villa Mercedes”, detalla Ribba. “Su función es hacer un testeo al azar de las personas que concurren con los síntomas respiratorios, a fin de determinar la circulación viral y la cepa que está circulando. El año pasado hubo un 13 por ciento de casos positivos de Covid detectados en estas unidades, mediante el análisis de 48.000 muestras que se tomaron de pacientes con distintos cuadros respiratorios”.
Ribba sostiene que no hay que alarmarse ante esas cifras, “ya que gracias a la vacunación hoy podemos tratar esos casos como cuadros respiratorios leves”. El responsable de Epidemiología de San Luis explica que “en el país el noventa por ciento de la circulación es ómicron. Dentro de esta variante, hay cepas y en este caso hay cinco cepas que son de importancia para la vigilancia. La NJ 1, la última que ha aparecido, no es más virulenta ni con más poder de producir enfermedades más graves, pero sí tiene más poder de transmisión, es más transmisible que las cepas anteriores”.
En la provincia todavía no han detectado contagios por esta cepa, “pero ya está circulando en el país”, agregó.
Hay que vacunarse
Ventilar los ambientes, mantener la higiene adecuada y frecuente de manos y acudir al médico ante la presencia de síntomas. Esas son las recomendaciones de las autoridades sanitarias, no solo para combatir el coronavirus, sino cualquier otra infección respiratoria aguda.
El responsable de Epidemiología sostiene que tan importante como mantener esas medidas es estar vacunado: “No interesa la marca de la vacuna ni la cepa de la vacuna en este caso. Porque los estudios demuestran que estas vacunas, que se llaman heterólogas, aumentan la inmunidad para este tipo de enfermedad”.
Mantenerse inmunizado es apropiado para toda la población, pero en especial es recomendable para quienes integran grupos de riesgo, como las personas de más de 50 años con comorbilidades, y los trabajadores de Salud, que “deberían vacunarse sí o sí una vez al año”.
“La población puede vacunarse en todos los centros de salud y hospitales de la provincia”, destacó el Ministerio de Salud provincial. Quienes integran grupos de riesgo pueden reforzar la inmunización cada seis meses, respetando el intervalo mínimo de al menos cuatro meses desde la última dosis. Si se trata de un paciente que no es de riesgo, recomiendan una dosis al año.
Ante el recelo que algunas personas tienen a la vacuna, incluso ante quienes aseguran que la vacunación les causó secuelas graves, el director de Epidemiología de San Luis sostiene que “no hay nada probado, comprobado”. “Obviamente, como cualquier otra vacuna, puede producir una reacción alérgica, local, sistémica, fiebre, pero que produzca secuelas respiratorias o cardíacas no está demostrado en ningún lado”, asegura.