Nombró a funcionarios, amigos, punteros políticos y familiares.
A apenas un mes de tener que dejar el gobierno, Alberto Rodríguez Saá decidió nombrar como planta permanente del Estado provincial a 5.600 contratados, entre ellos punteros políticos, funcionarios, amigos y familiares, como parte de destruir el Estado y comprometer el futuro del próximo gobierno y el de la sociedad en general.
Así fue que firmó el decreto N° 10140-MEP-2023 ordenando el pase a planta permanente desde el 1° de noviembre a todo el personal contratado del escalafón general de la administración pública provincial que tenga una antigüedad igual o mayor a seis meses, continuos o discontinuos.
Rodríguez Saá utilizó también esta medida inédita en la historia de la democracia en San Luis y violatoria de la Ley de Presupuesto provincial para esconder los nombramientos
en la administración pública de sus actuales funcionarios que dejarán sus puestos desde el 10 de diciembre.
Además de esos funcionarios, incluyó a familiares, amigos y punteros políticos.