Esta vez ingresaron a un cotillón en la peatonal por un boquete en el techo de su establecimiento, y sustrajeron dinero y mercadería.
Los hechos se pueden sintetizar en pocas palabras, no así la preocupación vecinal.
Esta semana dos delincuentes protagonizaron un asalto a mano armada al irrumpir en la fotocopiadora y librería “Bambi”, ubicada en la calle General Paz, justo frente al Centro Educativo No 9 “Doctor Juan Llerena” conocido como Escuela Normal. Se llevaron dinero en efectivo, un posnet y una computadora antes de darse a la fuga.
En los últimos días dos delincuentes en una motocicleta se detuvieron frente al comercio “24 Horas”, ubicado en la manzana 7142. El acompañante, armado con un revólver, amenazó y sustrajo dinero en efectivo, cartones de cigarrillos y chocolates. Pocos minutos después, repitieron el modus operandi en el local “La Cocucha”, situado en la intersección de las calles Carlos Pelegrini y Los Álamos, apoderándose nuevamente de dinero en efectivo.
El domingo en la mañana después de las nueve y media se llevaron todo el alambrado perimetral de la cancha de futbol del Club ATE II . El presidente dijo que les aconsejaron poner seguridad privada.
Ahora, Mario Pérez, un jubilado de 72 años fue asaltado y golpeado por delincuentes que entraron a su casa, ubicada en el barrio Los Poetas. “Buscaban plata, gritaban ‘quiero la plata’ y ‘te voy a matar a vos’”, contó luego que fue atendido debajo del ojo derecho donde le realizaron 6 puntos de sutura, y en el pómulo izquierdo otros dos.
“Tenemos de todo” dice un policía.
Una fuente policial se animó a hablar de la situación con Todo Un País. “Tenemos de todo, robo calificado, en banda, con armas cortas largas y hasta de juguete, los delincuentes no miden los peligros y te lo dicen “estamos Jugados”, tenemos bandas que vienen de otras ciudades, y trabajan con algunos contactos locales. Hay organizaciones que están en todo el país, y antes no entraban en la provincia” reconoce.
Más allá del abanico de delitos, los más comunes son arrebato a la salida de los colegios, de Anses, del Banco Nación de 25 de Mayo donde cobran los jubilados, las mochilas y zapatillas a la salida de los clubes.
– ¿Cuál es la solución?
– Hay que hacer un trabajo integral, entre la colocación de cámaras en todos los barrios y patrullas las 24 horas, las cabinas colocadas en plazas o ingresos a los barrios no sirven. Qué podés hacer si estás solo, llamar para que vengan, pero nada más, si bien es cómodo con aire y calefacción, no tenemos baño y hay que salir a pedirle algún vecino”.
– ¿Cómo están los móviles?
– Están la mayoría con falta de mantenimiento, por ejemplo teníamos una luz de la camioneta quemada, en vez de mandarte el foco o comprarlo acá y hacerlo colocar, te mandan a San Luis, perdiste todo el día y gastas más en combustible que lo que sale la lampara”.
– ¿Y el personal como está?
– Esperando las promesas, estamos cansados, siempre se habla de los problemas y las soluciones mágicas, y nunca llegan, siempre está primero el discurso político o quedar bien que sentarse a realizar un plan estratégico de seguridad”.
– ¿Las comisarias cómo están?
Como todo lo que te conté, sin gente en la parte administrativa, con lo cual los efectivos que deberían estar recorriendo las calles están en el edificio, y si le sumas que por ejemplo donde estoy somos tres por turno, si nos llaman y anda el móvil, salimos dos, y el tercero se queda a cuidar los presos que a veces son 6 y después no quieren que se escapen los delincuentes.
– ¿La gente cómo los trata?
Mal, cómo querés, si no le damos solución inmediata y si detenemos los delincuentes, cuando llegan al Juzgado quedan en libertad porque son delitos menores o son soporte de familia, siempre hay una posibilidad para que el delincuente esté en la calle.
– ¿La familia Policial tiene fe de que esto pueda cambiar?
La fe es lo último que se pierde, pero también los cambios son importantes, y creo que viene gente capacitada para dar un giro a la inseguridad.