La trilogía se compone de “Band of Brothers”, de 2001, seguida de “The Pacific” (2010) hasta finalmente llegar a esta producción, estrenada en Apple TV+, que aborda las vicisitudes de un batallón norteamericano en la Segunda Guerra Mundial.
La antología sobre la Segunda Guerra Mundial que Steven Spielberg y Tom Hanks inauguraron en 2001 con “Band of Brothers” y que continuó en 2010 con “The Pacific” adopta su planeada forma de trilogía con “Masters of the Air”, la miniserie que desembarcó en Apple TV+ para relatar las duras experiencias de un batallón de la Fuerza Aérea estadounidense durante aquel conflicto, desde sus enfrentamientos en las alturas contra la Alemania nazi hasta las consecuencias psicológicas que la contienda dejó en sus jóvenes combatientes.
Con sus dos primeros episodios ya disponibles en la plataforma -y otros ocho que estrenarán cada viernes-, la miniserie guionada por John Orloff en base al libro de Donald L. Miller “Masters of the Air: America’s Bomber Boys Who Fought the Air War Against Nazi Germany” llegó para darle continuidad al proyecto que la mencionada y galardonada dupla de cineasta y actor decidió producir tras su colaboración en la inolvidable “Rescatando al soldado Ryan”.
El muy bien logrado enfoque dramático de las dos propuestas y un trabajo de reconstrucción que no escatimó en recursos siempre dejó lugar para una entrega más, ahora materializada con “Masters of the Air”, que pone el ojo sobre una tercera pata militar del país del norte, la de la Fuerza Aérea y, específicamente, la del 100° grupo de bombarderos, tristemente bautizado “Bloody Hundredth” (o la “Cien sangrienta”) por su impresionante cantidad de 177 aviones perdidos en acción.
Los líderes de esta historia son los comandantes Gale “Buck” Cleven y John “Bucky” Egan, interpretados respectivamente por Austin Butler y Callum Turner, dos mejores amigos con actitudes y personalidades bien disímiles: mientras que el primero es tranquilo, reservado y prolijo, su extrovertido y rebelde compañero tiende más a jugar con los límites entre noches de fiesta y alcohol en los barcitos cercanos a las bases inglesas que albergaban a los Aliados de Norteamérica. Pero a pesar de la confianza en sí mismos, la dupla pronto descubrirá que los combates en el aire contra el Tercer Reich están lejos de ser fáciles.