En lo que resta del año, muy pronto, Juan Carlos Galvalicio será juzgado por un robo que cometió a fines de marzo. El hecho fue registrado por la cámara de video del local y luego se hizo viral en las redes sociales, generando más que indignación, risas. Hurtó algunos conjuntitos eróticos de un sex shop de Villa Mercedes y por eso la Fiscalía pidió dos años de cárcel.
El robo sucedió el 26 de marzo en el local de Lujuria, de Pedernera al 200. Según las averiguaciones, el delincuente había vigilado el negocio, a la espera de que en algún momento la empleada dejara a solas la parte de atención al cliente. Cuando la mujer, por un brevísimo instante, se fue hasta el fondo del comercio a buscar algo, entró el ladrón.
Sin rodeos ni dudas, tomó lo primero que vio: unas cajitas con lenceria erótica que había en un mostrador isla situado en el centeo del local.
Con los datos físicos y de vestimenta, luego de un recorrido que los llevó hasta el barrio 960 Viviendas, los patrulleros del Comando Radioeléctrico interceptaron a Galvalicio en el cruce de Hipólito Yrigoyen y Nelson. No se había despojado del botín, todavía tenía los conjuntitos eróticos sustraídos.