«Es importante formar y competir y este equipo estuvo a la altura». Con esa frase Diego Placente, el DT de la Selección Argentina Sub 20, cerró su respuesta ante la inquietud periodistica de Todo Un País, en la conferencia de prensa tras el triunfo de Marruecos 2-0, que coronó campeón a los «Leones del Atlas».
El sabor amargo, que siempre despierta la derrota, no destiñe el gran torneo que hizo el seleccionado, del que se hizo eco el pueblo Albiceleste, una vez consumada la caída. Y ahí se centró Todo Un País, en la consulta a Placente.
Escuchá a Placente, respondiendo a Todo Un País
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«Agradecerle a la gente. Es difícil, cuando entramos a un torneo todos queremos llegar lo más lejos posible y ser campeones, y era también nuestro objetivo», dijo el entrenador, y amplió: «Lo importante es llegar a la final, a jugar los 7 partidos, hasta el último día, y competir con las potencias. En los últimos dos Mundiales juveniles lo venimos haciendo, también en la Mayor», rubricó el DT.
Argentina llegó a una final en Sub 20 después de 18 años, y completó una gran tarea, con un plantel que hasta último momento no tuvo certezas en su conformación, por las bajas de jugadores que finalmente no fueron cedidos por sus clubes (Franco Mastantuono y Claudio Echeverri, los casos más notorios).
El fútbol argentino, fuente inagotable de jugadores maravillosos, puede darse el lujo de no contar con sus estrellas más luminosas, y aún así generar destellos para ser siempre candidato a campeonar.
Sin embargo, y más allá del talento que indefectiblemente inclina la balanza, hay una tarea sería, equilibrada y lanzada en el tiempo, que baja desde la Selección Mayor, que modificó la energía de los seleccionados, y devolvió el sentido de pertenencia con la camiseta que nos representa como país, algo extraviado hasta antes de 2021.
Siempre serán los éxitos, los que potencien y entreguen certezas; pero el GPS que traza el camino es el que consolida la ruta y el único que permite un buen destino, pese a que se trate de fútbol y su portada capacidad de sorpresa.