La Municipalidad de San Luis ya realizó mas de 14 mil castraciones desde que comenzó la gestión del actual intendente Gastón Hissa, en diciembre de 2023. El programa de castraciones periódicas y gratuitas no es solo una medida de protección animal, sino que fue concebida como una estrategia integral de salud social que impacta directamente en la comunidad.
El éxito del programa reside en su carácter masivo y completamente gratuito, garantizando que el acceso a la cirugía no dependa de la capacidad económica de los vecinos. Esto permite una intervención real y equitativa en la problemática de la superpoblación.
La operatividad de las campañas implica una logística constante, combinando operativos en centros fijos (como puede ser el Centro de Control de Zoonosis Municipal) y la utilización de unidades móviles que se desplazan a los barrios periféricos, muchas veces articuladas a través del programa de cercanía “La Muni Más Cerca”. Esa descentralización es crucial para facilitar el acceso a familias que viven lejos del centro.
De la Sanidad a la Seguridad
La castración masiva y sostenida va mucho más allá del cuidado individual de las mascotas, siendo una de las herramientas de gestión pública más efectivas para abordar múltiples desafíos urbanos: Salud Pública y Prevención de Zoonosis: La esterilización es fundamental para controlar la población y reducir la incidencia de enfermedades transmisibles a humanos, como la rabia (aunque su control en la zona sea estricto) y otras patologías zoonóticas. Una población animal controlada es sinónimo de un menor riesgo sanitario para la población.
Bienestar Animal y Reducción del Abandono: La principal causa del abandono y el sufrimiento animal es la cría indiscriminada. Al evitar los nacimientos no deseados, el municipio reduce del número de perros y gatos en situación de calle, mejorando su calidad de vida y reduciendo las molestias que estos generan en el espacio público.
La decisión del Municipio de encarar un política fuerte de castraciones forma parte de una idea de contribuir a la salud social urbana, estableciendo un estándar alto para la provincia en términos de gestión responsable de la fauna doméstica.
En el Municipio, las castraciones se realizan a gatos y perros, machos y hembras, entre los 7 meses y los 7 años. De esa manera, se previenen complicaciones en la salud del animal.
“Desde el inicio de la gestión llevamos casi 14.500 castraciones. Esta es una tarea que hemos realizado en 2024 y en 2025, con recorridos por todo el ejido urbano y parando en los distintos CAV. Tenemos dos tráilers. Uno hace todos los jueves el recorrido con La Muni Más Cerca y el segundo se establece durante un mes en un CAV, para brindar el servicio a los vecinos de la zona de influencia”, dijo Marcos Arce, director de Zoonosis.
Durante octubre el operativo está disponible en la zona sur de la capital, en el barrio Serranías Puntanas, más precisamente, en la Escuela Generativa Luis Lusquiños. “Si bien no es un CAV, articulamos con la institución para poder trabajar durante un mes. Bajo la misma modalidad, el año pasado estuvimos en la UPrO ubicada en ese sector”, detalló Arce.
“El intendente Gastón Hissa nos puso como horizonte la salud porque entiende que es una sola, tanto la humana como la animal. En ese sentido, manteniendo a raya la sobrepoblación de caninos y felinos, se tiene un control de las enfermedades zoonóticas, es decir, las que afectan a los seres humanos”, explicó el funcionario.
Ejemplos de estas patologías son la sarna, las parasitosis y la rabia. Esta última, aunque no presenta casos registrados en la actualidad, es una enfermedad mortal. Por ello, el Municipio realiza un control epidemiológico mediante campañas de vacunación obligatoria, conforme a lo establecido por normativas nacionales y municipales.
“Estamos en una ciudad en la que es común que las familias tengan una mascota, gato o perro, y siempre hay consultas. Nosotros, con charlas y talleres con información técnica, reforzamos la importancia de la tenencia responsable para prevenir enfermedades y mejorar la calidad de vida de las personas y los animales”, concluyó Arce.
Turnos y operatoria
La política de castraciones masivas se despliega, principalmente, en los operativos con turno previo que la Municipalidad realiza en los Centro de Atención al Vecino (CAV).
Arce explicó como es el procedimiento para obtener un turno para castración: “El vecino debe ir al CAV, anotarse, brindar los datos de su mascota y propios. A partir de ahí queda registrado. Luego, el equipo del CAV se comunica vía WhatsApp para confirmar la fecha y agendar el calendario de la castración”.
El vecino recibirá un formulario con un acta de aceptación para la cirugía. El mismo requiere información sobre patologías de base y características del animal, como sexo, tamaño y raza, entre otros. “Una vez que el vecino nos confirma, se da fecha y se lo cita para que vaya”, añadió el director.
Durante ese contacto, se le explica al propietario de la mascota los requisitos que el animal debe cumplir para poder acceder a la cirugía, como el ayuno de sólidos y líquidos. Además, por cuestiones de seguridad, los perros deben concurrir con correa y bozal; y los gatos en una caja transportadora o mochila.
Las cirugías de castración también se realizan en los operativos de los días jueves de La Muni Más Cerca. En la Dirección de Zoonosis, de forma estable los días martes, se realizan castraciones de emergencia y para los vecinos de la zona centro y emergencias.
Una ciudad amigable con las mascotas
En agosto, el Concejo Deliberante capitalino sancionó la ordenanza que crea el registro de Comercio Amigo de las Mascotas. El proyecto, remitido por el intendente Gastón Hissa en el mes de julio, establece una serie de beneficios tributarios para los comercios que adhieran a la propuesta y cuenta con un amplio respaldo del sector proteccionista de la ciudad.
La normativa prevé que, aquellos establecimientos que deseen permitir el ingreso de animales domésticos, deberán disponer de un espacio diferenciado para su permanencia. En caso de ser del rubro gastronómico, este sector deberá estar alejado de lugar donde se manipulen alimentos y bebidas. En todos los casos, el dueño de la mascota será el responsable de las condiciones de higiene y comportamiento de los animales, que deberán permanecer con correa y/o collar.