Guillermo Blanco fue el primer jefe de prensa de Diego Maradona, a quien conoció en los Juegos Evita de 1973 y acompañó en Barcelona y Nápoles.
Guillermo gestionó el histórico encuentro de Maradona con Pelé en 1980 y fue autor del libro «Maradona, il uomo, il mito, il campione».
Blanco es reconocido por su cercana relación con Maradona y su familia, a quienes consideró como una más de la suya.
En Buenos Aires, en la previa del último partido oficial de Leonel Messi en el país, con la camiseta de la Selección Argentina, Todo Un País compartió una charla de café con Blanco.
Guillermo, que de niño vivió en San Luis, de refirió a Maradona y Messi, los dos fenomenales número 10 de la Selección.
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Maradona y Messi.
‘Me paro esas dos ramas de la Y griega, y me agarro de ahí.
Qué puedo decir yo de Marilyn Monroe y Sophia Loren… qué puedo decir yo de Beethoven o de Mozart…
Hay una cuestión individual, porque no es objetivo, porque somos sujetos no objetos, desde ese lugar por todo lo que he vivido con Diego y por todo lo que he visto con Diego desde adentro, te diría Maradona; pero no puedo ser tan necio, que lo mismo diga gente que está teniendo algo especial con Messi», dijo Guillermo.
«Yo creo que, y no es porque sea más fácil la respuesta, pero disfrutemoslos, y déjenme a mí quedarme con ese Maradona, por lo que les dije, pero disfrutemos a los dos», afirmó.
Blanco recordó su paso por San Luis: «En La Florida, en el dique La Florida, no me hagan llenar de nostalgia; pero un año, tenía un tío ingeniero que estaba ahí, trabajando en la construcción del dique, y recuerdo que en el jeep que tenía íbamos por esos caminos áridos hasta El Trapiche, y me bañaba en esa agua tan limpia que tenía, con tanta roca».
Guillermo, una voz autorizada para hablar de los dos fenomenales número 10, vestidos de celeste y blanco.